BASES DE LA JUVENTUD DEL ATENEO

La Juventud Peronista perteneciente al Ateneo Para la Militancia Justicialista expone a la militancia su pensamiento con respecto la situación política de la denominada cuarta Rama partidaria y propone un análisis para arribar a conclusiones superadoras.


Para poder abordar un análisis certero y objetivo, es preciso comprender la situación actual de nuestra rama partidaria, para ello debemos interpretar cual es su realidad y como corregir sus falencias para llegar a un objetivo superador.

La Juventud Peronista se encuentra hoy en una situación crítica de paralización, situación de la cual es en parte responsable por sus propias carencias y en parte victima por herencia de la misma inacción y paralización de la dirigencia en su conjunto. “El hilo se corta por su lado mas débil” dice una frase muy conocida, y es por ello que la mochila que pesa sobre los hombros de la juventud es de una dimensión bastante considerable, que solo se resuelve con un cambio radical en la política o con varios años de trabajo constante. Es cierto que la militancia joven en el peronismo debe reaccionar ante tanto aletargo, pero necesita de los conductores partidarios una doble ayuda: primero debe otorgársele a la juventud un protagonismo mucho mayor del que tiene, si es que de alguna manera lo tiene, permitiendo que las ideas nuevas que por naturaleza trae consigo la sangre joven encuentre el cauce que hasta ahora no posee, permitiendo que entre en escena en los problemas mas sensibles y trascendentes de los gobiernos y del pueblo, dejando de lado la dirigencia madura sus mezquindades y otorgándole a la juventud una oportunidad real de participación y por sobre todas las cosas una inyección anímica, hoy de fundamental importancia.

Por otro lado, los conductores del Movimiento Nacional Justicialista deben permitirles a los jóvenes ser “artífices de su propio destino”, despejándoles el camino de actores foráneos y ajenos a la juventud; respetando las reglas de juego establecidas, sin modificaciones repentinas, antojadizas y caprichosas, como suele suceder cuando se modifican los márgenes de edad, siendo por momentos bueno a los 30 años y en otros a los 27 años, sospechosamente trastocados para excluir o permitir la participación de Fulano o Mengano, siendo la juventud mero espectador pasivo, aguantando pacientemente el manoseo de su principal herramienta estatutaria, el reglamento de la Juventud Peronista.

Reza una de las 20 verdades que Perón nos ha legado: “El Justicialismo es esencialmente popular. Todo círculo político es antipopular y, por lo tanto, no es justicialista”, principio este que nos debe dejar una reflexión y no quedar solo en el anecdotario histórico y teórico, ya que la juventud se encuentra sumamente fragmentada, sin sentido de pertenencia, prevaleciendo la protección de intereses sectoriales y enalteciéndose mas a un a agrupación política que al partido o a la rama. Es de una vital importancia que los jóvenes encuentren en la JP un espacio real de participación y formación, en donde este sea un polo de atracción y captación y no de repulsión y expulsión de nuevos militantes; la juventud debe estar unida, pensar y accionar en conjunto y no a expensas de pseudos-caudillos que solo “usan” a la juventud para realizar sus rencillas personales o sectoriales con otros dirigentes. Donde quedo aquello de que “en toda acción política la escala de valores de todo justicialista es la de que esta primero la patria, después el movimiento y luego los hombres”. Esto hoy no se cumple, debemos convencernos de que primero está la causa nacional que lleva adelante el Justicialismo y que las apetencias personales deben quedar en ultima instancia; no debemos hacer política por la política misma, debemos hacer política para lograr el fin único que nos legó el General Perón, lograr la felicidad del pueblo y la grandeza nacional.

¿El justicialista trabaja hoy para el movimiento? Ya lo dijo nuestro máximo líder, “El que en su nombre sirve a un círculo o a un hombre o a un caudillo, es justicialista solo de nombre”. Pareciera ser que los peronistas necesitan una refrescada de memoria, y otros necesitan un curso acelerado de adoctrinamiento exhaustivo.

El pensamiento de la juventud que forma parte del Ateneo para la Militancia Justicialista es “abierto” y tiene un espíritu “contenedor” y “reivindicativo”. Contenedor porque considera que el nuevo espacio creado debe atraer a la militancia joven sin mezquindades, con un criterio ampliamente participativo, no sectario ni cerrado. Y claramente reivindicativo, ya que pensamos que la juventud tiene mucho por decir y fundamentalmente mucho por hacer; al joven se le suele decir que no se le da mas participación ni responsabilidades porque no tiene experiencia, pero curiosamente ¿no creen ustedes que nunca la va a tener si se lo posterga?, la juventud no tiene la experiencia de algunos, pero si tiene una pureza moral y ética de la cual muchos de los que gozan de las mieles del poder desde hace 25 años no pueden ni siquiera aproximarse ni una pizca.

El recambio dirigencial debe darse cueste lo que cueste, el trasvasamiento generacional es inminente, en Jujuy deben imitar humildemente al compañero Néstor Kirchner , deben convocar a los jóvenes a la participación en la reestructuración y modernización del Movimiento Nacional Justicialista, ya que representa la mayor parte del padrón electoral.

Hoy algunos acomodados de siempre quieren hacer uso de organismos que se encuentran acéfalos acordándose repentinamente de la formación de cuadros, acordándose de que nuestra casa partidaria existe, que curiosamente ya no son necesarios los hoteles céntricos de la ciudad para convocar a la militancia como si lo fue en época de campaña electoral hace unos escasos meses atrás.

Decimos “basta” de oligarquizacion del peronismo; “basta” de la incursión del “paracaídas” en reemplazo de la militancia; decimos “basta” al uso y abuso de los más desposeídos y necesitados en épocas electorales; decimos “basta” de aquellos que consideran que el peronismo comienza con la función pública y no con la militancia partidaria.

La dirigencia debería tener aunque sea un poquito de la grandeza de Eva Perón, su humildad y amor a los desposeídos debe ser la luz que ilumine el camino, parece sorprendente que algunos se consideren peronistas cuando los ciega la ambición de tener unas bolsas mas de mercadería para seguir practicando el clientelismo político o para mendigar un puesto en el gobierno para la solución de problemas económicos personales teniendo el testimonio histórico del renunciamiento político mas ejemplificador que se ha dado en la política argentina, renunciando a una vice presidencia por el solo hecho de que el cariño de los cabecitas negras era su motivo mas importante.

¿Podrá si quiera la dirigencia política, la sindical, la empresarial, etc. resignar privilegios en sus intereses por la felicidad del pueblo y la grandeza nacional?

Esta Juventud Peronista se reivindica como tal, creemos en Néstor Kirchner, pero por ello no vamos a practicar la succión de sus calcetines y darnos en llamar Juventud K. No debemos perder nuestros orígenes.
Estamos convencidos de que somos soldados de Perón y Evita y de que solo triunfaremos estando unidos.



"Mi único heredero es el Pueblo"

Juan Domingo Perón


JUVENTUD PERONISTA DEL ATENEO PARA LA MILITANCIA JUSTICIALISTA